La vieja doña María subió un día al monte y volvió con una caja
en la que había guardado varios bichitos silvestres que le hiciesen más llevadera su soledad. Sucedió entonces que una vecina curiosa y algo chismosa quiso saber qué había dentro. Doña María se lo dijo pero la mujer entendió algo que nada tenía que ver con la realidad.
A partir de ahí se armó en todo el pueblo una tremenda confusión que llegó a alarmar a las autoridades. ¿Qué habría de cierto en el contenido de la misteriosa caja de la anciana?
“Animales de compañía” es un relato construido a partir de un juego
de palabras que muestra lo mucho que puede variar la percepción
de los acontecimientos al ir pasando de boca en boca. Estos versos rimados y llenos de humor animan a los lectores a jugar por sí mismos formando y deformando el lenguaje; una propuesta
que nos remite a la obra de clásicos como Lewis Carroll.