Tillich adopta, como hilo conductor de su exposición, el concepto de coraje de ser, entendido como el poder de la voluntad humana para sobreponerse al miedo y la angustia. El talante de este planteamiento es esencialmente afirmativo, en el sentido de que por coraje de ser Tillich entiende el acto ético por el que el ser humano afirma su propio ser a pesar de los elementos de su existencia que entran en conflicto con su autoafirmación esencial. En síntesis, este libro ofrece un penetrante análisis de filosofía existencial que impacta por la radicalidad con la que su autor aborda los aspectos más profundos inherentes al hecho mismo de existir, como la amenaza de la nada y la angustia o los desafíos que representan llegar a ser uno mismo y a la vez ser como parte de una sociedad.