«No se volvió para contemplar por última vez aquel mundo replegado en forma de maraña, no quiso guardar nada en su retina, sino que se puso a caminar con las
manos heladas en los bolsillos, atraída por el centro magnético de la línea azul, y caminó y caminó hasta que los pies le dolieron y las manos heladas se convirtieron
en pedazos independientes de su cuerpo.»
Al desaparecer su hermano, Greta huye de Nación, un adusto pueblo de cerezos negros asediado por los bárbaros. Atraviesa laberintos subterráneos y campos de batalla para ir en su busca a Agar, una ciudad ciega y sorda, de una tristeza eléctrica, tiendas saqueadas y neones rotos, en donde solamente sobreviven quienes carecen de escrúpulos.
Blanca Riestra (A Coruña, 1970) ha ganado en 2015 el XXVII Premio de Narrativa Torrente Ballester con esta ópera rock, una historia de vampiros ambientada en un futuro próximo y posapocalíptico que, según el fallo del jurado, «realiza una radiografía de las consecuencias a las que podría llevar la vida tal y como la conocemos hoy, regida por el omnipresente componente tecnológico que puede llegar a controlarla y destruirla».