Durante siglos, la Hermandad de Hechicería ha sobrevivido en el interior del Refugio, santuario mágico aislado del mundo exterior por una inquebrantable barrera mágica. Bajo el liderazgo de los Ancianos y sus férreas Leyes, los hechiceros contienen a las bestias que surgen de la tierra corrompida del Desfiladero mientras el paso del tiempo reduce su número y debilita su poder.
Kilheid es un joven aeromante con enormes ansias de conocimiento que, constantemente decepcionado y frustrado por las limitaciones impuestas a su poder, se abrirá camino lentamente en los secretos que ocultan el sentido de la prisión sin barrotes en la que generaciones de hechiceros han vivido y se han desvanecido. El precio que Kilheid habrá de pagar por aferrarse a una verdad fragmentada e incierta difícilmente podrá ser otro que su total aniquilación.
Mientras tanto, tras la inamovible Cúpula, el mundo de Lancria aguarda.