¿No sería alucinante poder encontrar todo lo que hemos ido perdiendo? En 1995, una niña perdió el guante de la mano izquierda. Cuando lo buscaba, dio con el lugar adonde va a parar todo lo extraviado: el Museo Perdido. Tiene un montón de pisos y está lleno de salas geniales y de cachivaches que nunca creíste que volverías a ver.
Adelante, y ¡no te pierdas!